Hoy
abandonamos el frenesí automovilístico de Hanoi para buscar un remanso de paz
en la isla de Cat Ba (con permiso de los tifones). Dejamos nuestro hotel después
de un copioso desayuno y cogimos un taxi que nos dejaría en la estación de
autobuses de Luong Yen. Para intentar dejarnos con mal sabor de boca, el
maldito taxista lo primero que hace es ir en dirección contraria. La estación
de autobuses se encuentra al suereste de nuestra posición, además, ayer
habíamos ido hasta allí caminando y sabíamos qué dirección debía seguir el
taxi. Pues bien, la primera dirección que toma el taxista es hacia el oeste (y
mucha pinta de cowboy no tenía el condenado). Le decimos que hay que ir en
sentido contrario, a lo que gira en la siguiente calle, ¡pero en dirección
norte! Y el muy c…….. se va hasta el mercado de Dong Xuan, ¡no había en la
ciudad otro lugar con más tráfico? Y claro, le volvemos a decir que vaya de una
vez en la dirección correcta, a lo que esta vez, después de haber inflado el
taxímetro, nos lleva por fin rumbo a la estación de autobús. Una vez allí le
decimos que pare a la entrada, pero el muy c….. nos dice que tiene que entrar
en la zona de aparcamiento de los autobuses, y es que (nosotros ya íbamos
prevenidos) si pasa la barrera del parking
lot aprovecha para cobrarnos 10000 dong más. Diana se baja del coche y el
muy listo no abre el maletero (en Asia los taxistas cierran el maletero en cuanto
suben al coche y lo abren ellos cuando se les antoja, así que toca espabilarse)
y cruza la barrera. Entonces, no sé cómo, consigo que el tipo se baje del coche
conmigo, abra el maletero, y cuando ya tenemos las mochilas en nuestro poder,
le pago la inflada tarifa, pero sin los 10000 dong extras que se quería cobrar,
y sin mirar atrás seguimos nuestro camino hasta la sala de espera de la
estación.
Realmente
la carrera no nos salió muy cara si piensas en euros, pero sí para lo que es
Hanoi, pero al final cansa estar regateando minuto a minuto para que no nos
timen, se hacen muy pesados. A pesar de eso, los vietnamitas son, de lejos,
mucho más amables que los chinos, y nosotros vamos aprendiendo el arte del
regateo a marchas forzadas con bastante buen resultado, por lo que vamos
comparando con otros turistas, así que estamos en el buen camino.
Dejado
atrás este pequeño incidente, solo quedaba subir al autobús que nos llevaría
hasta Cat Ba. Para ello compramos un billete integrado con la compañía Hoàng
Long, que primero te lleva en autobús hasta Haiphong, a unas 2 horas de Hanoi.
Una vez allí, y después de casi dejar en tierra a un chico que había decidido
ir al servicio cuando no tocaba, efectúa una parada en una oficina de la
compañía, y al cabo de unos minutos te lleva hasta el embarcadero en donde
coges un speed boat que te lleva
hasta un punto determinado de la isla de Cat Ba. Una vez bajas, coges otro
autobús, que después de 30 minutos te deja en el mismo pueblo de Cat Ba. Menos
mal que compramos este billete integrado, porque ir por tu cuenta a Cat Ba, a
parte de más caro, puede ser toda una odisea si no lo haces con esta compañía.
Afortunadamente,
el autobús nos había dejado en la misma puerta del hotel que habíamos reservado
la noche anterior (no solemos hacer reservas previas desde que estamos en
Vietnam, pero es que la diferencia de precio lo valía) y disfrutar del calor
infernal que hace en esta isla. No paramos de sudar ni un segundo, a este ritmo
me voy a quedar en los huesos…
Una vez
aposentados, fuimos a negociar un tour privado en barco por la bahía de Halong
para dentro de unos días, cuando vengan a visitarnos nuestros amigos
alicantinos, y además conseguimos una habitación para los días siguientes aún a
mejor precio. Así que habíamos triunfado, porque preguntando por varios hoteles
de la zona, ninguno no había ofrecido un precio tan bajo, y la habitación
estaba bastante bien, con su baño privado, aire acondicionado y wifi. Perfecto.
Después de haber concluido con nuestras tareas,
había que ir a disfrutar de una buena cena y unas Tiger bien fresquitas, ¡qué
ricasssss!
hola parella!! a veure si per fi se m'afegeix el comentari!!
ResponderEliminarQue bé que ja tingeu el blog i us poguem seguir el vostre rastre!! Seguiu explicant-nos les vostres aventures i experiències, així des d'aquí tenim alguns moments d'escapada de la realitat que estem vivint, jejeje i ens traslladem amb voslatres per aquests indrets que deuen ser tant espectaculars!
Molts petons!!!
Sergi i Laura
Ay los taxistas...pero vosotros teneis carrera y sabeis viajar...a por ellos!!Y no sufrais mucho, que luego haces el cambio y no merece la pena el mal rato!!He decidido que voy a poner vuestro blog en mis favoritos, y lo miro junto con los periódicos y el correo, así controlo por donde vais...y flipooo un rato. Seguid disfrutando, que esto no ha hecho más que empezar...See you around!!
ResponderEliminarBesos pa los dos.
Pilar